La que se ha liado con las circunscripciones, la que se ha liado con la ley electoral, pero de boquilla o de cafelillo o faceboquillo. Algunas personas incluso repiten y repiten que el nivel de abstención es muy elevado, cuando no es del todo cierto: es similar al de otros procesos electorales. Mucha gente, sí, pero en una cantidad similar.
Hay personas que han hecho apología del no voto, del voto nulo, de la abstención o lo que corresponda: ¡esto es política! Discutir, dar puntos de vista, ofrecer opiniones. Esto es política. Informarse de cuál ha sido el nivel de abstención, informarse de por qué un voto vale más que otro a pesar de que los votos a priori valgan lo mismo.
¿Por qué pensais que los candidatos se centran más en unos lugares que en otros? ¿Por qué pensais que a Albacete apenas vienen los líderes de los partidos? No hay que llamarse a engaño.
Como tampoco hay que llamarse a engaño con la posibilidad de un cambio en la ley electoral. Si hubiera cambio tendría que salir de los partidos mayoritarios y no lanzarán piedras contra su propio tejado, sería de tontos.
No estoy contando nada nuevo pero hay cuestiones que interesa repetirlas.
Como no es nuevo que diez millones de personas han decidido que gobierne el PP y nueve millones han decidido no votar. Como que miles de personas han decidido votar a un partido vasco (del cual muchos dudan) o muchos catalanes han decidido votar a CiU a pesar de los recortes, a pesar de su xenobofobia declarada.
Todo esto son maneras de hacer política. Son decisiones personales.
El que va a votar, el que no, el que tiene motivos para ser de izquierdas o derechas, el que no los tiene.
Todo el que pone un vídeo o un comentario en facebook, en el tuiter o en su blog, está haciendo política. Que nadie se llame a engaño.
Mi propuesta es siempre la misma: la política de personas durante todo el año, durante todos los años.
Si hay recortes, como si no, si cambia la educación como si no; si cambia la ley electoral o sanitaria, o educativa, o de medios de comunicación o de precios del pan, todos tendremos nuestro punto de vista y como tal tendremos que manifestarlo y hacer cosas, hcaer cosas, hacer cosas.
Y si no se te ocurre nada, y si ves que no tienes medios, si consideras que es imposible, busca alternativas porque las hay.
Recuerda que hubo un tiempo en que las personas sólo necesitan unas octavillas con cuatro letras bien apretadas para hacerse escuchar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario